"El principal objetivo de la educación es crear hombres que sean capaces de hacer cosas nuevas, no simplemente de repetir lo que otras generaciones han hecho; hombres creativos, inventivos y descubridores. El segundo objetivo de la educación es formar mentes críticas, que sepan verificar lo que se les ofrece sin aceptarlo incondicionalmente. El gran peligro de hoy son las frases hechas, las opiniones colectivas, las corrientes de pensamiento en serie. Tenemos que resistir individualmente, criticar, distinguir entre lo que está probado y lo que no lo está. De modo que necesitamos alumnos que sean activos, que aprendan pronto a descubrir cosas por sí mismos, en parte a través del material que preparemos para ello; que aprendan pronto a distinguir lo que es verificable de lo que simplemente es la primera idea que se les ha ocurrido."